Información Práctica

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Costumbres y tradiciones

Aquí hay algunos elementos de comprensión que te permitirán tener una estancia exitosa:

Saludos: Son muy importantes en Senegal. En general, los senegaleses son personas muy corteses y amables, y esperan lo mismo de ti.

Se dice hola todo el tiempo y a todos, incluso a perfectos desconocidos. Se dirá “Hola, ¿cómo estás?”, o también “¿Nanga def?” (a lo que se responderá “Mangi fi rekk”). Es bien visto emplear el famoso “Salamaleikum” (a lo que se responderá “Aleikum Salam”).

También se suele preguntar con gusto por la familia (aunque generalmente no se la conoce). Del mismo modo, las personas mayores son muy respetadas en África, por lo que se les saludará con todo el respeto necesario.

Comida: Si tienes la oportunidad, comparte la comida de una familia senegalesa, honrarás a tu anfitrión. Primero, nos lavamos las manos. La comida se toma generalmente en el suelo, sobre una estera (es importante quitarse los zapatos antes), las personas se agrupan alrededor del plato común. Generalmente se come con la mano, puedes pedir perfectamente una cuchara grande o un tenedor, nadie te lo reprochará. Se utiliza exclusivamente la mano derecha (la izquierda está reservada para otro uso…).

Se empieza a comer cuando el anfitrión ha pronunciado el famoso “Bismilahi”. Generalmente solo se bebe después del plato principal. Si se te ofrecen los mejores trozos, o si se quitan las espinas de un trozo de pescado antes de servírtelo, es una señal de respeto hacia el invitado. Se observa que los hombres generalmente comen antes que las mujeres y los niños.

El Té: La ceremonia del famoso té senegalés (Ataya) tiene una gran importancia. Si se te invita a tomar el té, sería totalmente inapropiado rechazarlo. Se compone de tres vasos sucesivos, cuya preparación puede llevar al menos una hora. Se te dirá con gusto que “el primero es amargo como la muerte, el segundo es dulce como la vida y el tercero es dulce como el amor”.

El Islam y sus pilares: El 95% de la población es musulmana, por lo que el Islam tiene mucha influencia en la forma de vida. No te sorprendas al ver a una persona haciendo sus abluciones en plena calle.

Las cinco oraciones diarias marcan el ritmo del día. Seguramente escucharás la primera llamada a la oración del muecín, transmitida por altavoces, a las 4:30 / 5:00 de la mañana. Tampoco es raro tener que esperar a que un vendedor haya terminado su oración para poder cerrar un trato. Del mismo modo, si tu taxista, mientras conduce, no responde a tus preguntas y parece hablar consigo mismo en voz baja, simplemente está rezando. En cualquier caso, sé paciente y respetuoso, nunca interrumpas a alguien durante su oración.

La limosna es uno de los cinco pilares del Islam, por lo que verás a un gran número de mendigos, especialmente en la ciudad. No dudes en dar una pequeña moneda cuando puedas.

Vestimenta: Vas a visitar un país donde el Islam está omnipresente, por lo que conviene respetar ciertas normas de cortesía en cuanto a la vestimenta.

Mostrar las piernas (chicos o chicas) no está bien visto por los musulmanes, así que fuera de las zonas de baño, viste de forma decente y no desaliñada. Evita los pantalones cortos y las minifaldas.

Muchos senegaleses que viven en las grandes ciudades (Dakar, Saint-Louis…) visten al estilo occidental (en particular los de confesión católica). Pero la ropa tradicional sigue siendo mayoritaria, ya sea el boubou o el pagne. En resumen, se puede decir que la ropa, el peinado e incluso el uso de joyas responden a códigos y son simbólicos de la clase social y la edad.

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